Die Wende (en español: el cambio) es el término que utilizaron los alemanes para referirse a la apertura -o caída- del muro de hormigón de 3,75 metros de altura que separaba lo que en aquel momento eran dos países; el de la RFA (República Federal Alemana) al oeste de la RDA (República Democrática Alemana) al este.
Un breve post no para contar la historia de los 28 años (1961 – 1989) durante los que estuvo erigido el Berliner Mauer que se extendía a lo largo de 45 km., sino para conmemorar que tal día como hoy hace 20 años, “los ciudadanos de la RDA fueron recibidos con entusiasmo por la población de Berlín Oeste. La mayoría de los bares cercanos al muro daban cerveza gratis y los desconocidos se abrazaban entre sí. En la euforia de esa noche, muchos berlineses occidentales escalaron el muro… El 9 de noviembre, los berlineses llevaron a cabo la destrucción del muro con todos los medios a su disposición (picos, martillos, etc.).”
Este hecho marcó no sólo la reunificación de las familias alemanas sino que también dio fin al estado de división política que existió en sus tierras durante 40 años; hoy celebro con ellos de corazón su vuelta a la libertad y con ello, su vuelta a la vida.