https://twitter.com/#!/LincolnOBarry/status/71404787870072832
Tengo que reconocer que lo primero que me vino a la cabeza cuando leí esta frase fue la vez que siendo víctima de en un accidente de tráfico (el día en que iba de camino a que me condecorasen por mis méritos universitarios), la persona que iba conmigo en el coche (gracias a Dios), atinó a marcar el “911” sólo para que nos pusieran en espera antes de atender nuestra “emergencia”… Como para que hubiese sido grave y nos hubiésemos quedado ahí pues…
Cuentos de estos hay muchos y los míos de hoy no rememoran la historia que acabo de contar; sino otras ocurrencias ¿menos graves? que han tenido lugar recientemente en el edificio que alberga la mayor parte de mis horas de curro estos días: el aeropuerto.