Hoy estaba revisando mi blog, y me he dado cuenta de la gran cantidad de cosas que una persona puede vivir en un período de tiempo relativamente corto.
Ha pasado poco más de tres meses desde que comencé a escribir en WordPress, y sin embargo parece que tengo un número interminable de posts en el que se concentran no sólo vivencias y sentimientos, sino también aprendizajes y experiencias que me viene genial leer y re-leer cuando me apetezca o cuando sea necesario.
Una de mis lectoras me ha comentado ya un par de veces que se ve una especie de evolución con cada post, cómo planteo una situación, cómo la analizo mientras escribo sobre ella y poco a poco voy llegando a una respuesta o a una solución. Es maravilloso.
Tengo muchos días sin escribir pero ya sabéis que tengo mis ciclos personales. Funcionan más o menos como mi ciclo menstrual, hay días en los que tengo mucha inspiración y ganas de escribir y lo hago, hay otros en los que por falta de tiempo no lo hago, hay otros en los que tengo ideas en la cabeza pero me faltan las ganas para plasmarlas aunque no necesariamente el tiempo para hacerlo, y hay días en los que no tengo ni inspiración ni ganas para escribir.
Últimamente he tenido de esos días malos en los que tengo muchas vivencias sobre las cuales querría, podría y debería estar escribiendo pero me faltan las ganas para hacerlo. Hoy me he vuelto a sentir animada así que intentaré poner esto al día porque definitivamente hay mucho que contar.
De momento comenzaré con las 3 cosas buenas de mi día de ayer, que las hubo al igual que en días anteriores, pero como no vine pues me toca plasmarlas hoy. Será genial recordar que cada día hay lo menos 3 cosas buenas:
- Ayer ganó España el partido de fútbol de las semi-finales de la Eurocopa contra el rival ruso, haciendo honor al lema “El día 26 a Rusia os volvéis” en lo que fue un partidazo que terminó con un marcador 0 – 3 con el que además nos colocamos directamente en la final que será este próximo domingo 29 contra Alemania.
- Ayer hablé con Maite, una amiga del colegio con la que nunca llegué a estudiar pero con la cual me junté durante algún tiempo. Nunca mantuvimos una relación muy estrecha, pero sí más cercana de la que suelo mantener con la mayoría de las personas. Últimamente hemos retomado mucho más nuestra amistad a distancia intercambiando e-mails casi a diario; y ayer, tras casi 7 años sin escucharle prácticamente la voz, he vuelto a conversar con ella y fue genial. Espero que a partir de ahora lo hagamos más a menudo.
- Ayer hablé con mi psicólogo. De esto no digo más, hoy me lo reservo.
Soy todo lo que me pasa 
Coraline
June 27, 2008 at 17:10
Al contrario, gracias sobretodo por leerme y por este comentario, es lo mas bonito que alguien que no me conoce me haya podido escribir jamas y aunque se diga asi, q no nos conocemos, puede que me conozcas mas q mucha gente con la que quizas comparto espacio fisico pero que realmente no sabe de qué voy o de qué va mi vida.
Sólo una cosita, si he sido imprudente con mis posts de Adecco, sólo quiero dejar constancia de que me refiero única y exclusivamente a mi propia experiencia en la empresa y en especial, a la delegación de la que formé parte en un momento determinado.
No por eso puedo juzgar todo lo que es la empresa porque por algo sigue siendo el líder en RRHH. Lo he pensado también, y estoy segura de que si hubiese trabajado en otra delegación de Adecco mi experiencia hubiese sido completamente distinta y probablemente más positiva. Creo que el problema es local aunque no me consta ni una cosa ni la otra.
No intento meterme en problemas por “desprestigiar” a la empresa, pero sé lo que viví y nadie puede privarme de contarlo.
La mejor no soy yo sino tú!!
rosanalpz
June 27, 2008 at 16:29
No hay dos sin tres. Sí, se ve una gran evolución personal de post a post. Todas esas reflexiones que haces terminan teniendo su fruto a los pocos días y, sí, siempre a mejor, siempre adelante.
Eso fue lo que me gustó de tu blog y lo que hace que siga entrando (casi) todos los días. Eso y que ya te he cogido cariño de tanto leerte 🙂 Sólo me queda invitarte a un café cuando vaya a Tenerife. Sin duda lo haré cuando vaya.
Sí, entro (casi) todos los días a tu blog, aunque no siempre comento. Pero eso no significa que lo que cuentas no me dé qué pensar; todo lo contrario. Me acuerdo y pienso mucho las cosas que dices, pero me falta tiempo para ponerme a escribir todo lo que me gustaría. Necesito unos días para procesar la información. Entonces sucede otra cosa, que a esas alturas, cuando yo me quiero poner a escribir toda la parrafada, ya has solucionado la cuestión. Eres la mejor. Por eso cuando pides que alguien diga algo, esos momentos que tenemos todos, no suelo decir nada, porque tú sola siempre sabes hacer lo mejor.
Hoy veo que tengo bastante curro leyendo tus post. 🙂 Y bastante que decir. Por prudencia no he hablado ni aquí ni en mi blog de Adecco, empresa con la que he tenido la ocasión de trabajar las tres últimas veces, la última (en la actualidad) también.
Sabes que ando escasa con el tiempo últimamente, pero también que querer es poder y que podemos (y que ganaremos la Eurocopa también). Este finde estaré fuera, pero seguro que saco un hueco para decir todo lo que quiero.
Por el momento y hasta entonces, quiero que sepas que hay mucha gente que te apoya y te aprecia mucho en la distancia.
Disculpa las desmesuradas dimensiones de mi comentario y recibe un fuerte abrazo.
¡Jessi, eres L A M E J O R!
Rosana.